Desde aquel día, me quedé con ganas de terminar la salida y llegar al castillo de Jimena, asi que me propuse volver, y hoy, gracias a mis compañeros del Club Ciclista Sierra Bermeja, me siento realizado con esta ruta.
La salida fue temprana, a las 8 am quedamos en la sede del estadio Muñoz Pérez. Yo llegué detrás del compañero Trujillo, y a los 5 minutos, llegaron Troy, Miguel, Javier Martos, Javier Porras, y Josemaría. En esto que llama Juan Carlos para decirnos que nos esperemos, que cierto individuo, cuyo nombre es Alvaro, se quedó sopa, y estaba esperandole, pues nada, esperemos!. Llegan los susodichos y nos ponemos meter las bicis en los coches, yo con Javier Porras, y salimos hacia Castellar, pero sin llegar a este. Alli empieza lo bueno!
Desde alli, seguimos esa pista y luego nos metimos en un carril de llaneo-subida hasta dar a unas vistas como estas:
A partir de aqui, una pequeña subida, y luego una bajada por carril roto, con muchas boñigas de vacas, que eran lanzadas contra nosotros por las ruedas, y gotas de barro producido por el rocio mañanero. Mis gafas quedaron como pasadas por gotelé! Despues de eso, nos metimos ya en el GR-7 dirección al castillo de Jimena.
Esta pista prometía ser divertida, sabía que habria barro, pero en ocasiones era casi demasiado barro, incluso tuvimos la mala suerte de encontrarnos en una zona con una gran zanja embarrada, un caballo que podría llevar un par de meses en el barro, asi que os podeis imaginar el panorama, cruzando el barrizal haciendo equilibrio con la bici en las manos para no tener que pisar nada el agua, que era una pura fuente de infecciones...
Después de la mala experiencia, venia el disfrute, llaneo rápido, con zonas de barro, mucho barrro, y con unos paisajes de los llanos de plantación espectaculares. A la izquierda la vista era la vía del tren y de los montes de la zona de Jimena, y a lo lejos, nuestra meta, el Castillo. La pista era fácil de seguir, solo hay que seguir recto hasta llegar al pueblo. De allí, nos metimos a un sendero hacia la subida del castillo, un sendero habilitado más bien para senderistas, pues durante un largo tramo, teniamos que llevar la bicicleta levantada de la rueda delantera. Os ilustro una pequeña parte de dicho tramo:
Después de esto, carril hasta empezar la subida, bastante dura, hasta el castillo. Apenas 2 km le calculo, pero con un carril bastante empedrado y luego un "acerado" de piedras que resbalaba si no se tenia cuidado. La subida daba a la parte baja del castillo, asi que aun quedaba para llegar. Callejeando un rato, encontramos el camino a seguir para no perdernos, que estos pueblos lian mucho. Llegamos al castillo, y yo hago un poco el ganso, y justo delante de todos los que ibamos digo: "Después de toda esta subida, lo que pega hacer es algo como esto!" Y acto seguido, me tumbo casi con la bici incluida, en la hierba, quedandome tirado, solo por hacer la gracia jaja.
Nos disponemos a repostar, barrita, agua, y a hacer fotos al castillo. De este no pongo las fotos aqui, mas abajo os dejo el link para que veais todas las fotos. Después del reportaje, foto grupal, y como no, yo haciendo un poco el indio jaja:
De aquí, bajada por el pueblo, saltando en los resaltes para que los coches no corran por el pueblo, altas velocidades, derrapadas, hasta que se acabó lo bueno y nos toca dar pedales en la carretera. Con esta parte de la ruta es con la que más satisfecho me siento. Conseguí tener un muy buen ritmo para mi, sin descolgarme en ningún momento del pelotón, y con buenas sensaciones sobre la bici. Hicimos unos 8 km, creo, de carretera, y nos metimos de nuevo a la pista, de alli, casi con el mismo ritmo que ibamos en la carretera, flechados por el camino. Aqui yo le aflojé un poco, aún quedaban un par de subidas y tampoco quería quemarme y hacer esperar a todos, asi que a mi ritmo, sin perder al resto, llegamos a la cancela donde la bajada con las cagarrutas, que ahora es subida, y chunga! Luego un pequeño llano, y otra subida, y luego ya bajada y llaneo hasta los coches, donde yo, como era de esperar, hice otra de las mias. Me suelto de manos en el carril, levanto las manos y las agito, cual ganador de una carrera, que eufórico, celebra su victoria en solitario.
Y vuelta a casa!! 60 km de pura diversión y con muy buenas sensaciones sobre mi fiel corcel aluminizado. Me siento bien conmigo mismo, hace 2 meses, hacer esta ruta, hubiese significado un sufrimiento abismal para mí.
Todas las fotos, aqui: Jimena, inolvidable.
Un saludo a todos!
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